La educación emocional como motor del desarrollo personal y social de las familias


Los niños y niñas que participan en el Grupo de Pequeños del Centro Socioeducativo Jara, que Asociación Barró lleva a cabo en Ciudad Lineal, están trabajado la educación emocional.
Para ello están realizando actividades a través de las cuales conocer las emociones, saber identificarlas y poder ponerles nombres. En concreto, han visionado la película de animación ‘Del revés’, que les ha servido de punto de partida para el análisis, además de servirles como una actividad de ocio.
Para los educadores y mediadores de Barró la importancia de este trabajo radica en que “trabajar la educación emocional a edad temprana favorece el desarrollo personal y social de los menores”. De ahí que esta línea de acción se extienda a los demás Grupos de Menores y al trabajo con adultos.
Y es que este es precisamente el objetivo de los programas socioeducativos que se llevan a cabo desde Jara. Para lo que se imparten actividades para favorecer el éxito escolar, el ocio saludable o el desarrollo de las habilidades sociales y personales, tanto con menores como con las familias del distrito. Lo que favorece la inclusión activa en el barrio.