LA EDUCACIÓN SIN PERDER LA IDENTIDAD, impacto de los matrimonios tempranos en la educación de las adolescentes


El pasado 15 de Noviembre celebramos la I Jornada con el lema LA EDUCACIÓN SIN PERDER LA IDENTIDAD. Esta actividad se realizó en el marco de la prevención de matrimonios tempranos de la Junta Municipal de Puente de Vallecas. Acompañados del calor de un auditorio del centro cultural Alberto Sánchez casi lleno, profesionales del Servicio de Mediación Intercultural con Población Gitana en Centros de Servicios Sociales hablaron del impacto de los matrimonios tempranos en la educación de las adolescentes y del marco legal que regula este hecho.
La Federación Red Artemisa participó de la Mesa de Riesgos de los matrimonios tempranos en la salud junto con la matrona del Centro de Salud de Buenos Aires, Rebeca Pérez, que trató el efecto del embarazo en las jóvenes a nivel físico. El embarazo está considerado de riesgo en menores de 16 años, ya que tienen más riesgo de sufrir complicaciones de diverso tipo durante el mismo. Por el lado emocional, comentó que los adolescentes en general y las adolescentes en especial, por ser ellas las que cargan con mayor parte de los cuidados y crianza de los hijos, no están preparadas psicológicamente para asumir una responsabilidad tan grande.
Pero sobretodo la Jornada fue una oda a la EDUCACIÓN. El Servicio de Mediación de Prevención de Absentismo Escolar en la Comunidad Gitana expuso la labor que desempeña día a día con familias y profesionales. Por su parte, Isabel Bueno, Maestra del CEIP Manuel Núñez de Arenas y experta en convivencia emocionó al publico con una exposición en la que llamó a la consideración de las particularidades étnicas y culturales de los pueblos en general, y del pueblo gitano en especial, como un valor añadido y nunca como un obstáculo en el desarrollo educativo de las niñas y de los niños gitanos.
Finalmente, la Jornada contó con las aportaciones de dos jóvenes referentes comunitarios que han destacado por su perseverancia y amor al conocimiento: Sara Jiménez, estudiante de Magisterio y Adolfo Muñoz, estudiante de Derecho. Ambos contaron sus experiencias e instaron a los ahí presentes, a creer en sí mismos y ahondaron de nuevo en la idea de que ser gitano es un valor añadido y no un impedimento a la hora de formarse.